En menos de una semana, a José Luis Rodríguez le tocó vivir emociones extremas. No habían transcurrido ni siete días del emotivo homenaje que le dispensaron en el Latin American Music Award por sus 60 años de carrera, cuando recibió la noticia de que su exmánager Héctor “Toti” Maselli había fallecido.
La información del suicidio del representante argentino, ocurrido el 20 de abril, encontró eco en los principales medios del continente, debido a la influencia que el personaje tuvo en el medio artístico hispanoamericano y, en particular, a la genialidad con que manejó la internacionalización de la estrella venezolana.
José Luis ya tenía una significativa carrera como cantante y actor cuando conoció a Toti en 1976. Incluso comenzaba a ser identificado como El Puma por el papel que le escribió Delia Fiallo para la telenovela Una muchacha llamada Milagros (1973-1974), cuya trama fue musicalizada por el tema Mi amigo El Puma del argentino Sandro.
Maselli hizo dos jugadas importantes: firmar al caraqueño como protagonista de la historia puertorriqueña Cristina Bazán (1978), al lado de la actriz Johanna Rosaly; y lograr un contrato con la transnacional RCA Víctor que se tradujo en cuatro discos, incluyendo: Por si volvieras (1978) y EMe vas a echar de menos (1980), contentivo de éxitos como Atrévete, Adivina de dónde soy y Siempre acabo por llorar del dúo Herrero y Armenteros, además del superhit Pavo Real Pavo real de César del Ávila.
Respaldado por esta última grabación convenció a los organizadores del Festival de Viña del Mar para que incluyeran a José Luis en su cartel de 1980. Esta fue la jugada maestra. El impacto tuvo tal repercusión que se convirtió en un sex symbol. El mismo año protagonizó la segunda telenovela en la isla del encanto: El ídolo, junto a Marilyn Pupo. Y más tarde pasó a CBS, sello con el que grabó el álbum imprescindible Dueño de nada, respaldado por el Midas de la composición, Manuel Alejandro.
Después de muchas conversaciones y negativas, Toti convenció a El Puma de residenciarse en Miami, por logística. El sí llegó en 1986. Y un poco más tarde la noticia del divorcio de Lila Morillo. De hecho, la zuliana ha señalado al mánager como una causa importante de la ruptura que se produjo después de 20 años de matrimonio y dos hijas.
Maselli y Rodríguez degustaron la fama y el éxito. El argentino sostuvo romances con actrices como Hilda Carrero y Lucía Méndez. Además, movió la grabación del himno Cantaré cantarás y unió a dos grandes del mundo de la música: José Luis y Julio Iglesias en el tema Torero. Lástima que la depresión originada por la pandemia haya matizado sus últimos días.
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