El homicida de la médico ocurrido en Valencia, estado Carabobo que mantiene consternada a la comunidad sigue generando noticias. Uno de los tres vigilantes de la escuela, Yonathan Yoel Figueroa confesó su crimen con detalles a las autoridades.
Nardy Mora tuvo la intuición de que algo le iba a pasar. Durante dos meses prestando sus servicios en el centro asistencial, ubicado dentro de la U.E. Dr. Rafael Guerra Méndez en Santa Rosa, Valencia, estado Carabobo, vivió con temor, hasta que le confesó a una de sus amigas, sentirse incómoda ante las miradas y el comportamiento de uno de los tres vigilantes que laboraba en el recinto, refiriéndose a Yonathan Yoel Figueroa.
El presentimiento cobró fuerzas. La doctora Mora fue golpeada en la cabeza, abusada sexualmente y posteriormente desmembrada, según narró el mismo Figueroa el pasado viernes 26 de agosto.
Las partes de la especialista fueron puestas por su homicida en una nevera, mientras que otras las arrojó en el río Cabriales de la misma localidad.
El esposo de la doctora habría detallado que como de costumbre la mañana del pasado miércoles dejó a su pareja en su lugar de trabajo, pero se sorprendió cuando cerca de la 1:00 pm recibió un mensaje desde su número de celular donde le decía que “se iba a Colombia por la situación del país”.
Pensó era que algo andaba mal, porque que el texto tenía errores ortográficos y la doctora tenía excelente ortografía, intentó llamarla, pero no logró comunicarse, la buscó, sin resultados, por lo que hizo oficial una denuncia ante las autoridades correspondientes.
En la búsqueda, funcionarios de la brigada canina K9 Forense, perteneciente al Senamecf acudieron el pasado sábado 27 de agosto y encontraron los restos de la doctora en las aguas del río Cabriales.
Lo más sorprendente para los investigadores fue que en el sitio también encontraron otros restos que al parecer no pertenecen al cuerpo de la víctima. Se tuvo conocimiento que hay dos personas detenidas por el caso, sin embargo, ya se tiene la confesión del vigilante.
Las investigaciones continuarán porque los otros restos hallados que no pertenecen a la doctora asesinada, dan indicios que podría tratarse de un “sitio de liberación”.
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