Joven científico británico estaba visitando, a su novia en EEUU y murió por una bala perdida

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El lamentable incidente sucedió el pasado fin de semana en Brookhaven, Georgia, a alrededor de las 2 am, mientras estaban en la cama. La pareja sintió una fuerte ronda de disparos y poco después el joven se desplomó. La policía cree que se trata de un hecho aleatorio, por disparos imprudentes en los alrededores.

Matthew Willson, un astrofísico británico de 31 años, fue a visitar a su novia Katherine Sephard en Atlanta, Georgia, sin imaginar que una bala perdida acabaría con su vida.

El trágico incidente ocurrió el pasado fin de semana en la localidad de Brookhaven, a alrededor de las 2 am, mientras estaban durmiendo. La pareja sintió una fuerte ronda de disparos y ella sugirió llamar a la policía.

«Sus últimas palabras fueron: ‘Claro, estoy seguro de que solo están jugando'», contó Shepard a medios británicos. Entonces vio a su novio desplomarse en la oscuridad y supo que una bala lo había alcanzado.

La mujer intentó detener la hemorragia con una toalla, mientras le pedía «quédate conmigo», pero sus ojos se cerraban y le costaba respirar. Tras ser transportado al hospital, Willson falleció.

La policía de Brookhaven, dijo en un comunicado que es probable que la bala que impactó en la cabeza fue disparada desde un área fuera del complejo de apartamentos en un “acto aleatorio que involucró a personas que participaron en la descarga imprudente» de una o más armas de fuego.

“Este es un acto sin sentido. Esta es una víctima completamente inocente”, dijo el sargento Jake Kissel a WSB-TV y detalló que Willson acababa de llegar a Estados Unidos.

La pareja se había conocido cuando él estuvo trabajando como investigador en la Universidad Estatal de Georgia.

Conmoción por la muerte

Una hermana de Willson dijo a medios locales británicos que alguien “solo estaba disparando un arma por diversión. Y ni siquiera saben que nos han quitado a una persona tan hermosa”. “No tiene lógica”, dijo. “Queremos justicia para Matthew”.

La policía de Brookhaven, una localidad de unos 55,000 habitantes, ha hecho un llamamiento a la población a presentar cualquier información relacionada con el tiroteo.

En un homenaje a Willson, la Universidad de Exeter en Reino Unido dijo en un comunicado que su antiguo estudiante de doctorado era «un miembro muy querido del equipo de astrofísica». “Hemos sido informados sobre su trágica muerte en EEUU y nuestros corazones están con su familia, amigos y colegas”.

La muerte del británico ha tenido un gran impacto en Reino Unido, un país con una de las tasas de homicidios por arma de fuego más bajas del mundo y leyes muy estrictas de control de armas. En EEUU, en cambio, casi 20,000 estadounidenses murieron por esa causa en 2020, según el Archivo de Violencia Armada.


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