La venezolana de 18 años de edad que fue drogada y 4busad4 s3xu4lm3nt3 en Argentina, afirmo este 27-E, que su vida cambió después de lo ocurrido en una local de Buenos Aires y que ahora sufre muchísimo.
En una entrevista para TVV Noticias, dijo que todo comenzó el 23-E al responder una solicitud de empleo publicada en Facebook. En el transcurso del día, el hombre le ofreció en varias oportunidades algo de tomar, pero ella lo rechazó. Incluso en una oportunidad le preguntó si quería un trago de vodka, pero tampoco aceptó.
Sin embargo, cerca de la hora de cierre, mientras atendía a dos clientas, el hombre le acercó un vaso de agua que dejó sobre el mostrador.
“Minutos antes de que él cerrara ingresaron unas señoras y yo lo único que le dije es que iba a tomar agua. Pero la iba a tomar de un filtro que él tenia. Me levanté y cuando regresé el agua ya la tenía allí. Hacía mucho calor y estaba tan metida de hacer bien el trabajo para quedar que no me percaté que ya la había servido”, lamentó.
Poco después de tomar el agua la joven comenzó a sentirse mareada y vio cómo su empleador cerraba el local.
Tras sentir que se le dormían las manos pudo llamar a su hermana, sin embargo, ya no podía decir ni una palabra. “Marqué la última llamada de mi celular que por suerte era la de mi hermana y ella contestó, cuando ella contesta solo vi que la llamada estaba corriendo pero ya no le pude hablar ni decir absolutamente nada porque sentí que me dormía”, contó.
La mamá de la joven venezolana estaba en el hospital con su esposo. Al recibir el mensaje decidió llamar a la policía. Salió apresurada rumbo al local.
Una vez en el sitio, y acompañada por oficiales, tocó reiteradamente la puerta del local. Tras la insistencia, oyeron la voz del hombre y los uniformados ingresaron.
En el negocio Garzón Uniformes encontraron a la joven venezolana con el pantalón mojado, la ropa interior desajustada, vistiendo una camisa sucia del agresor y, aparentemente, dopada.
La joven reaccionó a la noticia de la puesta en libertad condicional del hombre, debido a que no poseía antecedentes penales.
«Yo estoy sufriendo mucho ¿Cómo lo van a soltar? (…) De verdad doy gracias a Dios de no recordar nada, porque no habría podido soportarlo«, manifestó.
Array