Un día como hoy hace 10 años, Félix Hernández era el encargado de subirse a la lomita de T-Movil Park por parte de los Marineros de Seattle para enfrentar a los Tampa Bay Rays.

El venezolano tenía la misión de dominar a una de las ofensivas más sólidas del béisbol en esa temporada. Que contaba con nombres como los de Evan Longoria, B.J Upton, Carlos Peña y Ben Zobrist.

Pero el oriundo de Valencia vendría inspirado para este juego. El criollo retiró el primer episodio por la vía rápida del 1,2 y 3. La segunda entrada la comenzó ponchando al primer bateador, al segundo con rodado al catcher y el tercero con elevado al jardín izquierdo.
El tercer inning lo comenzó dominando al bateador con elevado al jardín izquierdo, ponchando al segundo bateador y dominado al tercero con fly al left field. la cuarta entrada la empezó retirando al primer bateador con línea al tercera base y ponchando a los dos siguientes.
El quinto inning lo comenzó dominado al bateador con línea al segunda base, retiró al segundo bateador con elevado al jardín izquierdo y al tercero con rodado al catcher.
En el sexto episodio se comenzaba a notar el cansancio que estaba teniendo el AS de los Marineros en el encuentro, pero eso no evitó que retirara a los tres bateadores por la vía del ponche.
La séptima entrada empezó dominando al bateador con rodado a la segunda base, al segundo lo dominó con roletazo al campocorto y al tercero con rodado a la primera base. En el octavo episodio ‘La corte de Rey’ observaría de nuevo a su majestad ponchar a los tres bateadores.
Todos los aficionados del béisbol y sobre todo los venezolanos observaban el juego al momento de comenzar el noveno episodio. Al primer bateador de la entrada lo retiró ponchandolo, al segundo segundo con rodado al campocorto y al tercero lo retiró con un slider pegado para dejar sin reacción al bateador con su ponche número 12 de la tarde y concretar la hazaña.
Felix Hernández consiguió el Juego Perfecto número 23 en la historia de las Grandes Ligas y se convirtió en el primer venezolano, el único hasta los momentos, en conseguir la perfección en la MLB.

El criollo realizó un total de 113 lanzamientos de los cuales 77 fueron en la zona de strike y consiguió un total de 12 ponches.
Desde ese momento no se ha observado otro Juego perfecto en las Grandes Ligas.