La Policía de Nueva York confirmó este sábado en rueda de prensa que oficiales dispararon contra un hombre, que ha sido identificado por medios locales como Raul Hardy, que amenazó con matar a la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, y «hacer estallar la cabeza» de los policías.
Los oficiales de policía llegaron a la escena a las 6:05 pm, en el vecindario Cambria Heights de Queens en 116th Ave., después de recibir una llamada de amenaza del sujeto.
«Hubo una llamada de un hombre al 911, que se identificó con su nombre, e hizo numerosas amenazas. Amenazó a la gobernadora, a varios funcionarios y dignatarios y a miembros del departamento de policía. Y dejó claro que iba a estallarle la cabeza a los primeros policías que viera«, reveló el jefe de patrulla de la policía de Nueva York, Jeffrey Maddrey.
El hombre, según reporte de medios locales, habría amenazado también de muerte al comisionado de la policía de Nueva York, Keechant Sewell.
Un tiempo después, según Maddrey, el hombre se comunicó nuevamente con el 911 y reiteró las mismas amenazas. Oficiales recibieron la llamada y movilizaron numerosas unidades a la vivienda de Hardy.
Raul Hardy disparó contra los oficiales y salió herido
«Cuando los oficiales llegaron a la casa, un hombre salió de la vivienda. Un oficial lo llamó por su nombre y él confirma su identidad. El hombre se niega a escuchar a los oficiales, de sacarse las manos de los bolsillos y no moverse. Hay una confrontación verbal y el hombre apunta a los oficiales, entonces se produce un intercambio de disparos. El hombre dispara varias veces y seis oficiales le responden. Los policiales derriban al hombre y lo controlan«, relató Maddrey.
Según la policía, el sujeto fue trasladado a un hospital local donde se recupera de las heridas.
Maddrey agregó que esta persona ha estado involucrada en otros incidentes en los que la policía ha tenido que intervenir, al parecer el hombre tendría problemas mentales.
Ningún oficial resultó herido durante el altercado, confirmó el portavoz del Departamento de Policía de Nueva York.
Maddrey indicó además que el 911 recibe muchas llamadas por el estilo, pero la mayoría son infundadas, aunque por esto nunca dejan de ser atendidas por los oficiales.
La gobernadora Hochul todavía no se ha referido al incidente en ninguno de sus canales de información.
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