El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó este miércoles con regular o incluso cerrar empresas de redes sociales, esto se originó un día después de que Twitter Inc agregó por primera vez una advertencia en algunos de los tuits del mandatario para que los lectores verifiquen sus afirmaciones.
En tal sentido, sin ofrecer pruebas, Trump afirmó sus criticas de índole político por parte de dichas plataformas tecnológicas en un par de tempranas publicaciones en Twitter.
“Los republicanos sienten que las plataformas de redes sociales silencian totalmente las voces conservadoras. Las regularemos enérgicamente o las cerraremos, antes de que podamos permitir que eso suceda”, indicó.
Además, añadió: “¡¡¡¡Mejoren su comportamiento, AHORA!!!!”.
Representantes de Twitter y Facebook no lograron ser contactados de inmediato para comentar los tuits de Trump. Debido a esto, las acciones de las compañías se desplomaron en las operaciones previas a la apertura de los mercados tras las publicaciones.
En los tuits, el presidente republicano volvió a cargar contra el voto por correo. Trump difundió tuits similares en la víspera, lo que llevó a que Twitter añadiera un signo de exclamación en azul bajo sus mensajes, alertando que sus comentarios eran falsos y habían sido desmontados por verificadores.
El dramático giro realizado por la compañía tecnológica, que ha ajustado sus políticas en los últimos años entre críticas de que su cultura de no intromisión permitía que medrara la desinformación, llevó a Trump a acusarle de interferencia en la próxima elección presidencial en Estados Unidos.
En mayo, la compañía empezó a aplicar una nueva etiqueta a los tuits “que contenían información manipulada” y en marzo añadió advertencias sobre información errónea relacionada con coronavirus.
El año pasado, Twitter informó que prohibiría todos los anuncios políticos de su plataforma. El CEO de Twitter, Jack Dorsey, dijo que creía que la difusión de mensajes políticos “debería ganarse, no comprarse”. Pero la plataforma ha tenido problemas para llegar a un acuerdo sobre si debería controlar los tuits engañosos de los líderes mundiales.
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