Diego Armando Maradona no sólo fue un embajador de los movimientos de izquierdas en Sudamérica desde el punto de vista mediático, sino también concreto. El ‘10‘ entabló una relación de negocios tanto con los Castro en Cuba como con Hugo Chávez y, especialmente, Nicolás Maduro en Venezuela.
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Con la muerte del ‘Pelusa‘, han salido a la luz las cantidades (al menos una buena parte) que tenía el argentino y el régimen chavista, en el que este último ha dejado una ingente deuda. Los responsables de la herencia de Maradona (un asunto que arrastrará mucho en la propia familia) están desgranando ahora un entramado de bienes, contratos, cuentas e ingresos que tuvo el futbolista, algunos procedentes de Venezuela.
El problema es que este no pagó todo lo que debía y entre retrasos e intereses, el estado venezolano acumuló una deuda de unos 50 millones de dólares con Maradona. Según Infobae, esta cifra se debe a diversos conceptos, entre los que se encuentra su participación como comentarista de Telesur (el canal estatal) en el Mundial de Rusia 2018, donde además fue seleccionador argentino. Sólo por esto, Maradona llevaba esperando dos años unos 4 millones de dólares.
El montante principal de dinero pendiente de pagarle venía por su participación en varias empresas estatales, como una de cereales y una fábrica de harinas, además de ejercer de embajador del régimen en las negociaciones con otros países.
«Hay negocios de Maradona que tienen que ver con el abastecimiento de materias primas, commodities (mercancía de uso general) a Venezuela, en operaciones que tienen que ver con trueque como el petróleo. Es decir que Maradona tenía una trader (empresa intermediaria) radicada en Europa en sociedad con otras personas que se ocupaba de negocios de intercambios de cereales por petróleo. Eso tiene un valor comercial, la empresa.
Y también tienen negocios que se están produciendo en este mismo momento«, explicó en ‘Radio La Red‘ Mauricio D’Alessandro, abogado de Matías Morla, que a su vez fue el abogado de Maradona y, desde su muerte, testaferro de sus bienes.
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