Por medio de redes sociales, se viralizó un video en el que un ciudadano estadounidense, reconocido como James Iannazzo, de 48 años de edad, ingresó a una tienda de batidos en Fairfield, un pueblo de Connecticut, en Estados Unidos, y comenzó a gritarles a los empleados detrás del mostrador.
Por lo visto, Iannazzo habría reaccionado al hecho de que la bebida que pidió en el local tenía maní y su hijo, quien tomó del batido, era alérgico. Afirmó que tuvieron que administrarle 2 inyecciones para contrarrestar la reacción a la alergia.
Sin embargo, la primera respuesta de Iannazzo fue dirigirse a la tienda y desatar su enojo hacia las trabajadoras que se encontraban en el lugar. En el video, se puede escuchar a Iannazzo maldiciendo y preguntando por un gerente. Además, insultó a las empleadas y las llamó «niñas de secundaria ignorantes» y se refirió, específicamente, sobre una como «inmigrante fracasada».
Cuando una de las trabajadoras, se le acercó para increparlo, luego de que atacara a otra empleada, el hombre aprovechó un descuido y le arrojó una bebida a la mujer.
«Puedes llamar a la empresa cuando quieras, adiós (…). ¡Voy a llamar a la policía!«, le gritó la trabajadora al hombre.
Luego del hecho y de que se conociera a por medio de redes sociales, Iannazzo fue detenido y se le acusó de un crimen de odio. Poco después, fue despedido de su empleo en Merrill Lynch, donde trabajaba desde 1995.
En correspondencia con New York Post, el hombre habría ofrecido disculpas por su comportamiento: «Mis acciones en Robek’s estuvieron mal y las lamento profundamente. No reflejan mis valores ni mi carácter. Me siento terrible por haber perdido la compostura».
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