Timoteo Zambrano: Si se produce la mega elección toda la oposición va a participar (+Detalles)

0
362

Timoteo  Zambrano ha estado sentado en las 3 mesas de diálogo que se han entablado entre el Gobierno y la oposición a lo largo de la era chavista en busca de la llamada “convivencia pacífica”.

El presidente de la Comisión de Política Exterior de la AN considera que Venezuela está en la ruta del consenso. Foto: Orlando Alviarez

Aquella del 2002-2003 que se inauguró en una sede de la Conferencia Episcopal Venezolana con la mediación del ex-presidente colombiano César Gaviria. Era la Mesa de Negociación y Acuerdos, cuyas deliberaciones transcurrieron en el Hotel Meliá Caracas, mientras hervía de militares la plaza Francia de Altamira. 

Allí Zambrano, integrante de la delegación opositora, compartió debates con el entonces diputado Nicolás Maduro, Leopoldo López y Alfredo Peña, alcaldes de Chacao y Caracas respectivamente, entre otros. Zambrano también estuvo en las dos mesas de diálogo auspiciadas por el reino de Noruega, la última de ellas celebrada en República Dominicana y en donde un sector de la oposición se paró y se radicó en Colombia hasta el día de hoy. Zambrano y otros factores de oposición prosiguieron el diálogo y materializaron un acuerdo electoral suscrito en septiembre de 2019. Fruto de ello, fueron las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre de 2020, comicios en los cuales Timoteo compitió con la tarjeta de Cambiemos, partido al cual denomina como una organización “donde todos son bienvenidos”. Ahora desde el parlamento, Zambrano sigue en su afán de dialogante desde una comisión especial presidida por el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Jorge Rodríguez.

Precisamente Timoteo nos recibe en la sede de Cambiemos con todo su equipo de trabajo, incluido Freddy Lepage, su compañero de andanzas cuando ambos militaban en Acción Democrática. Al llegar nos entrega un documento salido del horno que resume su propuesta de unas megaelecciones, como una puerta que se le abre al sector opositor que está fuera y dentro de Venezuela. “Eso es factible”, dice de entrada quitándose el tapabocas y embadurnando sus manos con gel.   

—¿De qué han servido las mesas de diálogo Gobierno-Oposición?

—Han habido distintos momentos; y cada momento tiene su afán. Ubiquemos 2002-2003 la gran Mesa de Negociación y Acuerdos, que vino el ex presidente César Gaviria, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) como facilitador. No era para resolver toda la crisis en una sola sentada. Porque aquí no se aplica la metodología de ‘nada está acordado hasta que todo esté aprobado’. Es decir, que si tienes 100 puntos, hasta que no estén de acuerdo con los 100 puntos, no firman el acuerdo. Esa metodología es evidente que aquí ha fracasado; fracasó en Noruega y en República Dominicana, más no todo lo que preacordamos, que hoy día son los documentos base para cualquier negociación. Fue el documento de la Mesa de Diálogo Nacional, cuando firmamos el acuerdo el 16 de septiembre de 2019. Volviendo a la mesa del 2002-2003, allí se acordó desescalar la violencia política, cambiamos el sistema electoral a uno automatizado y el referendo revocatorio. Ese referendo lo logramos, lo pactamos. Otra cosa fue el resultado. 


Array