Emirlendris Benítez fue detenida el 5 de agosto de 2018 y sentenciada a 30 años de prisión. Sufre de múltiples problemas de salud que no están siendo atendidos en el INOF.
Caracas. Al menos 12 citas con el inmunólogo perdió Emirlendris Benítez desde noviembre de 2022. La principal razón: la falta de una boleta de traslado desde el Instituto Nacional de Orientación Femenina (INOF) para algún centro asistencial y la falta de vehículo o ambulancias.
“En el INOF, a las reclusas las sacan cuando se están prácticamente muriendo”, expresó una fuente extraoficial, quien prefirió mantener su identidad bajo resguardo por medidas de protección.
Actualmente, Emirlendris se encuentra privada de libertad en el INOF, cárcel de mujeres ubicada en Los Teques, estado Miranda. La mujer, de 42 años de edad, tiene tres órdenes médicas para una resonancia magnética, que aún siguen a la espera a pesar de que el año pasado la familia pagó por esta evaluación en un centro médico en la ciudad de Caracas. Igualmente, debe visitar al traumatólogo.
La fuente que conversó con Crónica.Uno informó que los familiares tienen temor de declarar a la prensa. Contó que en años anteriores, cuando ella estuvo privada de libertad en la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim), Emirlendris presuntamente fue torturada y castigada por las distintas campañas y denuncias públicas que hacía la familia.
Múltiples afecciones
Agregó que producto de las torturas que recibió la mujer en la Dgcim: golpes, patadas –incluso por funcionarios hombres–, le desencadenaron diversos problemas de salud.
Una hernia discal, el hombro derecho dislocado, desmayos continuos, presión arterial alterada, fuertes dolores en la columna, insomnio, dermatitis, pérdida de cabello, inflamación en las piernas y pies y dificultad para caminar. Por tal razón, debe movilizarse en una silla de ruedas. No puede mantenerse mucho tiempo de pie porque se cansa y pierde el equilibrio.
La fuente extraoficial comentó que como la familia no tiene un diagnóstico certero de lo que padece Emirlendris, la automedican para aliviar algunos dolores. “Se le inyecta para el dolor, pero eso no le calma nada”.
Producto de las torturas y malos tratos, Emirlendris también perdió un bebé, según contó la familia en una entrevista anterior. Tenía entre tres o cuatro meses de embarazo.
Caso del dron
Emirlendris Carolina Benítez Rosales fue detenida en la madrugada del 5 de agosto de 2018, por un presunto intento de “magnicidio” contra Nicolás Maduro. Por ello fue condenada a 30 años de prisión, en agosto de 2022.
Ese día ella y su pareja, Yolmer Escalona, le hacían un traslado –con dirección al estado Barinas– a José Miguel Estrada González y Alberto José Bracho Rosques, quienes supuestamente estaban solicitados por los hechos del 4 de agosto de 2018.
Emirlendris no sabía realmente el motivo de su detención. Fue trasladada a la sede de la Dgcim de Acarigua, en Portuguesa, y luego a la sede de Boleíta, en Caracas.
El 4 de agosto de 2018, Néstor Reverol, ministro de Interior, Justicia y Paz de aquel entonces, dijo que dos drones fueron cargados con explosivos C4 y usados para atacar a Nicolás Maduro. El día de los hechos se llevaba a cabo un desfile militar en conmemoración del 81º aniversario de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), en la avenida Bolívar de Caracas.
De acuerdo con Stefania Migliorini, abogada defensora y miembro del Foro Penal, a Emirlendris le imputaron seis delitos: homicidio intencional calificado en grado de frustración en contra del Presidente de la República, homicidio intencional calificado en grave frustración con alevosía y por motivos fútiles en contra de alto mando militar, traición a la patria, terrorismo y asociación para delinquir.
Salud en deterioro
Migliorini mencionó que en reiteradas oportunidades han hecho la solicitud de traslado a la Corte de Apelaciones 1° de Terrorismo, pero no la envían hasta el INOF. Dijo que en las últimas semanas han intentado ratificar la solicitud de traslado médico, pero el expediente de Emirlendris no está en la corte, por lo que no pueden recibir la solicitud.
“La salud de Emirlendris está empeorando. Y, aunado a ello, los tribunales no hacen caso a la decisión del Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria, no hace caso a la medida cautelar que tiene por parte de la CIDH y tampoco a la solicitud de la liberación inmediata que tiene por parte de Amnistía Internacional”, alegó la experta.
Resaltó que la mujer “no tiene absolutamente nada que ver con los hechos que se le están acusando”, que no existe una sentencia firme ni elementos probatorios que comprueben su culpabilidad.
Emirlendris es madre de dos hijos, el menor tiene nueve años. Es oriunda de Barquisimeto.
Según la ONG Foro Penal, desde 2014 se han registrado 15.799 detenciones políticas en Venezuela. Asimismo, documentó que en la actualidad hay 286 presos políticos, entre ellos 20 son mujeres.
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