De acuerdo con los médicos, los pacientes que recibieron los pulmones habrían adquirido una forma grave de neumonía contraída por el donante. Uno de ellos falleció. Este sería el primer caso en su tipo.
Un insólito caso tomó por sorpresa a la comunidad médica en Inglaterra, luego de un trasplante de pulmón. Los pacientes beneficiados fueran diagnosticados con una rara enfermedad, producto de sus nuevos órganos. De acuerdo con los expertos, los pulmones procedían de un hombre de unos 30 años que murió ahogado en agua dulce, tras permanecer sumergido más de 5 minutos.
Según el Centro para el Control de Enfermedades, los pulmones del sujeto fueron donados siete días después a una mujer de 70 años y a un hombre de 60. Sin embargo, lo que prometía ser un nuevo comienzo en sus vidas, se convirtió en una pesadilla, ya que ambos adquirieron una enfermedad como resultado del trasplante.
Este sería el primer caso en su tipo, así que la conclusión de los expertos fue que la infección debió haber surgido de los pulmones donados, después de la muerte de su portador original. Una de las hipótesis que manejan los médicos es que el hombre que se ahogó en agua dulce tenía los pulmones infectados con una forma grave de neumonía.
Esta infección se produce al inhalar la bacteria en pequeñas gotas de agua o al tragar accidentalmente este líquido con contenido de Legionella. Por otro lado, se conoció que los pulmones no fueron examinados correctamente para determinar la presencia de esta enfermedad antes de ser entregados a los pacientes beneficiados.
Nueve días después del trasplante de pulmón, la mujer desarrolló anemia y un recuento alto de glóbulos blancos, lo que indicaba la presencia de una infección o una inflamación. Tras realizarse un par de pruebas para determinar la causa de su enfermedad, los resultados revelaron que tenía legionarios y tuvo que ser tratada con antibióticos, logrando recuperarse.
Lastimosamente, el segundo paciente no corrió con la misma suerte. Luego de dar positivo a una variante diferente de Legionella, el hombre sufrió varias complicaciones tras la cirugía y falleció seis meses después por una insuficiencia respiratoria.
Por su parte, los expertos médicos se encuentran realizando una investigación para determinar la fuente primaria de la infección, mientras que el hospital involucrado analiza pruebas de los sistemas de agua y las torres de enfriamiento de órganos para detectar la bacteria, aunque por ahora no se ha reportado ningún caso similar.
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