Khairul Aming, cerró su fábrica durante una semana para que sus 60 empleadas vivieran unas vacaciones soñadas. Incluso, este generoso jefe les dio dinero a los trabajadores para que les compraran regalos a sus familiares.
Los empleados de una compañía vivieron unas vacaciones de lujo gracias al jefe de la compañía donde trabajan, pues este los llevó de viaje con todos los gastos pagos y dinero extra para hacer compras.
Khairul Aming, es el nombre del hombre que cerró su fábrica durante una semana para llevarse a sus empleados, 60 en total, a disfrutar de unas vacaciones soñadas.
Este jefe pagó todo: desde los pasajes aéreos, el hospedaje en un hotel cinco estrellas y la comida. Incluso, cubrió las excursiones de lujo en yate para ver la puesta de sol en una verdadera joya turística: Langkawi, en Malasia.
Unas vacaciones con las que Aming, dueño de una empresa de salsa picante muy popular para condimentar platos en el sudeste asiático, quiso agradecerles a sus trabajadores el buen momento que vive su compañía.
Tanta generosidad alcanzó también para entregar dinero extra a los empleados, de tal forma que pudieran llevarles presentes a sus familias.
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