Una mujer de 26 años de edad fue condenada este jueves a 49 años de cárcel tras estrangular a su hijo luego de que el niño le dijera que quería más a su abuela que a ella.
Según el reporte policial, la mujer había aceptado ser la autora del crimen, tras reconocer que se enfureció porque el pequeño prefería a su abuela materna. Además confesó que luego de asesinarlo metió el cuerpo del niño en una bolsa negra para poder transportarlo al lugar donde lo abandonó.
«Daniel me decía siempre que su verdadera mamá era Luisa, eso me molestaba mucho. Sentía celos», dijo.
La madre del pequeño fue identificada como Daniela N y se conoció que el suceso ocurrió en el paraje de San Pedro Quiatoni de Tlacolula, México. Vecinos de la víctima declararon a los medios locales que el pequeño sufría de constantes maltratos, que le eran propinados por su progenitora.
La madre fue interrogada por elementos de seguridad, luego de que algunas vecinas que conocían a su hijo Daniel denunciaran que no había visto al niño desde hace varios días. Sin embargo fue incapaz de justificar su ausencia y terminó por confesar el crimen.
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La mujer aceptó haber sido quien acabó con la vida de su hijo luego de que este le dijera que quería más a su abuela, la madre de Daniela, que a ella. Esto enfureció a la mujer, quien cometió tortura en contra del niño para posteriormente darle muerte.
Primero dijo haberle inyectado thinner, una sustancia tóxica, lo cual le provocó un dolor intenso en todo el cuerpo al pequeño. Al ver que su hijo estaba sufriendo, decidió, según sus palabras, llevar a cabo un “acto de piedad”, al inyectarle también en la espalda y los brazos.
Al ver que su hijo aún seguía con vida, la mujer fue capaz todavía de mezclar gasolina con veneno para ratas e igual se lo inyectó; pese a todo, el niño se resistía a morir, por lo que finalmente Daniela lo estranguló.
La mujer fue a dejar el cuerpo del niño en una carretera, en donde fue encontrado por la policía, quienes iniciaron la investigación para saber exactamente lo que había ocurrido con el menor, descubriendo así este terrible acto cometido por su propia madre.
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