Sucesos/Internacionales.-Una escena sorprendente se registró en la ciudad de Salta, Argentina cuando la noche del 7 de febrero se registró la explosión de un vehículo en una estación de servicio.
Una agente policial fue detenida luego que su coche explotara y esparciera una cantidad enorme de cocaína.
Todo ocurrió luego que la dueña del vehículo iba a estacionar su Ford Focus, en el que viajaban ella y sus tres hijos de 9, 13 y 14 años de edad.
Las cámaras de la gasolinera recogieron el momento en el que el coche sufrió una explosión sin motivo aparente, y por suerte sin que nadie se encontrara en su interior. En las mismas imágenes se ve cómo en el momento de la deflagración se llena el ambiente de un polvo blanco que inunda el suelo y que la policía identificó de forma inequívoca como cocaína, una vez que se presentó en el lugar.
El coche, cuya explosión se nota que se origina en el interior de la parte trasera, queda literalmente destrozado. Por ello parece un milagro que el único herido leve haya sido un menor que tuvo que ser atendido por los fragmentos de los vidrios.
Al parecer la detenida, identificada por la policía como Sofía Chaparro, llevaba ocultos más de 20 kg de cocaína tras un falso tabique junto al depósito de combustible. El método no es nuevo y en el país sudamericano ya se han registrado varias explosiones por trasladar la droga de esta manera.
De momento la policía sabe que la cocaína procede de Bolivia y que su destino era Buenos Aires, hacia donde se dirigía la detenida.
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