Algunos días después del tiroteo que cobró la vida de 19 niños y 2 profesores, la madre de Salvador Ramos, responsable del hecho, pidió perdón a los padres de las víctimas.
Adriana Reyes, la progenitora de Ramos, comentó que está en «shock» por lo ocurrido y que no sabe cómo justificar lo hecho por su hijo.
«No tengo palabras para decir, no sé lo que estaba pensando. Él tenía sus razones para hacer lo que hizo y por favor no lo juzguen. Yo solo quiero que los niños inocentes que murieron que me perdonen», expresó, en una entrevista brindada a CNN.
Reiteró, como ya lo había dicho antes, que su hijo era «muy tranquilo» y que no le hacía daño a nadie.
«Él era muy callado. Era muy callado. Él lo era. No molestaba a nadie, no le hacía nada a nadie», anexó.
Por su parte, Rolando Reyes, abuelo del joven, reafirmó estos dichos y aseveró que desconocía que su nieto tuviera armas en su poder. De hecho, aseveró que Salvador pasaba mucho tiempo en su habitación y solo jugaba videojuegos.
Array