“Un terror los pies del pobre”, contó una de las cuatro personas que rescató al hombre que se internó en la selva. “Sentí un miedo porque se veía diferente su rostro”, dijo.
Jhonattan Acosta, es el hombre que se internó en la selva con unos amigos para cazar en el municipio de Baures, en Bolivia, el 25-enero. Pasó un mes perdido en el monte hasta que fue hallado con vida.
El día de su desaparición, los amigos que salieron de caza con él no lograron ubicarlo cuando decidieron regresar a sus hogares. Desde ese momento inició su búsqueda, a la que se sumaron equipos de rescate de Cochabamba, Santa Cruz y otros departamentos, según informó el medio Unitel.
Pero a medida que avanzaban los días y no había rastro de su paradero, varios abandonaron el rescate y regresaron a sus lugares de origen.
Su familia no perdía la esperanza y continuaba en la búsqueda del hombre que se internó a la selva.
“Estamos seguros de que mi hermano está con vida, hay señales de humo. Esperamos la ayuda del Gobierno”, comentó Omar Acosta, hermano del cazado, el 31-enero.
Fue el 25-febrero, exactamente un mes después de su desaparición, que cuatro hombres que se metieron al monte dieron con él por sorpresa.
“Por favor, sáquenme de aquí”, fue el grito del hombre que se internó en la selva que alcanzó a escuchar que había personas cerca de él.
Sus salvadores pensaron inicialmente que quien gritaba era el hermano de la víctima, porque ya estaban preparándose para irse, pero luego vieron a un sujeto al que no reconocieron en un comienzo.
“Sentí un miedo porque se veía diferente su rostro”, narró uno de sus rescatistas.
Pero luego se dio cuenta de que era su amigo porque “él estaba parado con su escopeta”.
Sus amigos lo auxiliaron, le dieron agua y comida. Lo primero que pidió el hombre que se internó a la selva fue un baño.
“Le sacamos las botas. Un terror los pies del pobre”, contó uno de sus salvadores.
Con dificultad para caminar, el hombre que se internó en la selva fue trasladado a un hospital donde inicialmente informaron que se encontraba deshidratado.
“Estoy en la iglesia de Baures agradeciendo a Dios por su vida. Muchas gracias a todos, por sus oraciones, por todo”, expresó conmovida Milade Acosta, la hermana de Jhonattan.
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