La paciente estaba en cuidados intensivos en un hospital del estado Mérida.
Tras luchar durante 2 meses por su vida, en una unidad de cuidados intensivos en Venezuela, murió el domingo pasado la mujer de 57 años que se había contagiado de COVID-19 y luego de hongo negro, caso médico que levantó gran preocupación en el país, desde el momento en el que se conoció.
El deceso de la paciente, quien estaba hospitalizada en el estado Mérida, lo dio a conocer el director de la Corporación de Salud (Corposalud), Rubén Gallo, en correspondencia con lo informado por medios venezolanos.
“Tratamos de salvarle la vida a la paciente, pero no fue posible y todo producto de una patología de COVID-19 que arrasa con lo que devenga. Esta es una paciente diabética, estaba descompensada y produjo una serie de alteraciones. El cuerpo médico hizo todo lo que pudo por salvarle la vida, pero no fue posible”, expreso Gallo a un medio local.
En correspondencia con el diario Los Andes, la mujer murió por hongo negro; le realizaron 2 limpiezas quirúrgicas en la zona facial y, según declaraciones del director de Corposalud, ella tenía afectado el ojo derecho tras las intervenciones que tuvo.
La mujer falleció tras un paro cardíaco. “Lamentamos mucho este deceso incluso, producto del COVID-19 y todo esto produjo las complicaciones. Fue un caso autóctono de la ciudad de Ejido. No fue contagiada por nadie como andan diciendo por ahí que fue importado de Brasil, no fue así”, aclaró la autoridad sanitaria.
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