Las autoridades ecuatorianas reportaron que este martes recibieron más de 1.900 llamadas telefónicas de auxilio.
Este martes, la ola de violencia en Ecuador, resultado de las acciones de los grupos criminales que operan en el país, dejó un saldo de diez víctimas mortales, tres heridos, vehículos incinerados y al menos seis secuestrados, así como 70 presuntos delincuentes detenidos.
En una reunión de emergencia convocada por el alcalde de la ciudad de Guayaquil, Aquiles Álvarez, se informó que había ocho fallecidos y tres heridos (dos civiles y un agente policial), según Telesur.
Sin embargo, un comunicado emitido posteriormente por la Policía confirmó la muerte de dos de sus agentes.
Por otra parte, medios locales informaron la noche del martes que en un nuevo atentado en Guayaquil, varios individuos detonaron un carro en el sector Isla Trinitaria y se presume que tres personas que se encontraban en el interior fallecieron.
Esta ciudad, ubicada en el centro-sur de la región litoral de Ecuador, se ha convertido en el epicentro de la violencia exacerbada en el país tras la fuga de una cárcel de José Adolfo Macías, alias Fito, líder de la banda de los Choneros.
Las autoridades ecuatorianas reportaron que durante la jornada recibieron más de 1.900 llamadas telefónicas de auxilio.
El comandante de la Policía de Guayaquil, el coronel José Angulos, al presentar a los medios un balance de los hechos violentos, informó que, además de las víctimas mortales y los heridos, se incineraron cuatro vehículos, se registraron daños a la infraestructura y se contabilizaron 14 presuntos delincuentes detenidos.
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